Miren, hoy que ha sido día de huelga general, la segunda en lo que va de año, yo he ido a trabajar. ¿Por qué? Porque me ha dado la gana. Sencillamente por eso. Porque trabajo en una ONG, porque presto un servicio público, porque unos sindicatos que no me representan no tienen derecho a decirme lo que tengo o lo que no tengo que hacer... en definitiva, porque soy libre y los sindicatos en este país coartan la puñetera libertad individual de las personas.
No voy a hacer valoraciones sobre la huelga. Eso lo dejo para los periodistas pelotilleros (los serios son otra cosa), los políticos y demás gentes de mal vivir que gustan de hablar por hablar. Además, estoy demasiado cansado después de una guardia. Sin embargo no me privaré de decir que no sé que es más patético: un piquete "informativo" apedreando camiones o esos periodistillas de tres al cuarto, tertulianos que proliferan por esos programas asquerosos destinados a modelar la opinión pública. Resultaba absolutamente patético verlos en visperas de la huelga haciendo todo tipo de bromas fáciles sobre los sindicalistas, tachándolos de esto o de aquello, como si el poder al que ellos sirven fuera inmaculado. Especialmente patética ha resultado la patronal, advirtiendo sobre el brutal coste económico de un día de huelga. En una tertulia de radio, fijense, un economista independiente (que los hay) decía que si en España un día de huelga supusiese tantas pérdidas querría decir que la actividad económica estaría tan desarrollada que crecería a razón del 50% anual. O sea, el presidente de la patronal es un embustero. Tan embustero como los dirigentes sindicales que estiman el seguimiento de la huelga en un 75% mientras que el descenso en el gasto eléctrico (indicador irrefutable sobre un descenso en la actividad industrial) no ha llegado hoy al 12%. ¡Y qué me dicen del PSOE apoyando la huelga! Sencillamente grandioso.
Periodistas pelotilleros, políticos, empresarios trápalas, banqueros, sindicalistas de puño en alto... un atajo de facinerosos que sólo buscan arrimar el ascua a su sardina. Sólo quiero una cosa: que me dejen en paz.
Así que has ido a trabajar por que lo haces en una ONG....., espero que de voluntario por que si es cobrando ya te vale.., claro que tal y como están las cosas cada vez vas a tener más trabajo. yo en un mes tendré que ir a ver si me dais trabajo y en año a que me deis de comer.
ResponderEliminarYo nunca he estado a favor de la huelga y creo que los sindicalistas son unos jetas, pero es que esta vez era para dejar claro que hasta aqui llego el cachondeo....., no te pedían que cerrases, ni que dejases de ir a trabajar la mayoría de las movilizaciones fueron por la tarde noche.
Solo se te pedía apoyo,yo no fui por que me toco firmar mínimos, mi trabajo si que es imprescindible, de hecho se reforzó el servicio.
Ah! Las pocas veces que he trabajado para una ONG ha sido gratis utilizando mi tiempo libre...
Estimada señora:
EliminarRespeto absolutamente su posición ante la huelga general, posición al menos tan respetable como la mía. Sin embargo, debo protestar ante su sesgada visión sobre las personas que prestan servicio en las ONGs, pues muchas de éstas precisan de personal a tiempo completo para llevar a cabo sus objetivos y el personal a tiempo completo necesita un sueldo para pagar su hipoteca y llenar la nevera. El voluntariado presta un servicio inestimable y aporta su propia impronta y carisma, pero no basta por sí mismo. En concreto yo trabajo para el programa terapéutico Proyecto Hombre de mi localidad, dentro de una plantilla de algo menos de 40 personas que trabajamos a destajo, pero con la mayor de las motivaciones, cobrando un sueldo, eso sí.Por otra parte contamos con un cuerpo de voluntariado maravilloso sin el cual no podríamos tirar del carro como tiramos. Juntos, somos un buen equipo.
Permítame un ruego, con el mayor de los respetos: en el futuro cuide de no descalificar gratuitamente el modo de vida de personas de las que nada sabe.